Los bebés nacen con el reflejo de buscar el pecho de su madre. Sin embargo, muchas madres necesitan apoyo práctico para posicionar a su bebé para amamantar y asegurar que esté bien agarrado al seno. La lactancia materna requiere práctica, tanto para las madres como para los bebés. La lactancia materna también requiere mucho tiempo, por lo que las madres necesitan espacio y apoyo en el hogar y el trabajo.

Después del parto muchas madres experimentan molestias en los primeros días cuando están aprendiendo a amamantar. Es fundamental el apoyo adecuado al posicionar a su bebé, asegurando que esté correctamente agarrado al seno, evitando así el dolor en los pezones.

La lactancia requiere tiempo, por lo que las madres necesitan espacio y apoyo en el hogar y el trabajo.

Las madres que amamantan necesitan comer una dieta balanceada y, por lo general, no hay necesidad de cambiar los hábitos alimentarios. Los bebés están expuestos a las preferencias alimentarias de sus madres desde que están en el útero. Pero si una madre percibe que su bebé presenta una reacción a un alimento específico que ha ingerido, lo mejor es consultar a un especialista.

Cada niño es diferente. Lo mejor es ofrecer al bebé el pecho durante el primer año, cada 3 horas, procurando que sea a libre demanda de acuerdo con las necesidades del bebé.

La producción de leche materna está determinada por la capacidad del bebé para agarrarse al seno y extraer leche en cada toma, así como la frecuencia de la lactancia. La lactancia materna no es un trabajo que deba asumir la mujer por su cuenta; las madres necesitan apoyo, así como orientación continua sobre lactancia por parte de prestadores de servicios de salud. También requieren ayuda en el hogar y la posibilidad de mantenerse saludables, comiendo y bebiendo adecuadamente.

Dependiendo del tipo de enfermedad, generalmente las madres pueden continuar amamantando cuando están enfermas. Deben asegurarse de recibir el tratamiento adecuado y descansar, comer y beber bien. En muchos casos, las madres le pasarán a su bebé los anticuerpos que produjeron para afrontar sus enfermedades o afecciones, ayudándole a su hijo o hija a construir sus propias defensas.

• La madre y su hija o hijo deben estar cómodos. Dar de lactar no debe doler.
• Colocar la cara de su hija o hijo frente a su pecho y la nariz frente al pezón.
• Colocar la barriga de su hija o hijo en contacto con la suya.
• Apoyar la espalda de su hija o hijo sobre su antebrazo y colocar la cabeza en el pliegue del codo.
• Levantar su seno con su mano en forma de C y estimule con el pezón la boca de su hija o hijo.

No hay pruebas que demuestren que sea más difícil dejar de amamantar después de 1 año, pero sí hay evidencia de que amamantar hasta los 2 años es beneficioso tanto para las madres como para los niños. Todas las madres y los bebés son diferentes y es necesario que juntos acuerden durante cuánto tiempo se dará la lactancia materna.

Muchas madres continúan amamantando después de volver al trabajo. Es importante que conozcas las políticas sobre lactancia materna de tu país y de tu propio lugar de trabajo. Tienes derecho a un horario y un lugar específico para amamantar durante las horas de trabajo, o es posible que puedas ir a casa y amamantar, pedirle a un familiar o amigo que te traiga a tu bebé o puedes extraerte la leche y llevarla a casa.

La leche materna extraída debe guardarse en frascos de vidrio con tapa rosca de plástico.

• Lavar bien los frascos antes de usarlos.
• Sumergirlos en agua hirviendo por 5 minutos para desinfectarlos.
• Sacarlos del agua, y ponga la tapa y el frasco boca abajo sobre un trapo limpio.
• Pégueles una etiqueta con la fecha y hora de extracción. Guárdelos a temperatura ambiente en el refrigerador o en el congelador.

• No consumir alcohol, cigarrillos, drogas y ningún medicamento que no se prescrito por un médico.
• Dormir en el día al mismo tiempo que su hija o hijo. Esto ayuda a aliviar el cansancio y el estrés.
• La pareja debe involucrarse en la crianza de su hija o hijo, para disfrutar tiempo juntos y compartir afecto. Esto también ayuda a que la madre tenga un descanso adecuado.
• Dedicar tiempo a una actividad que le ayude a relajarse: tome un baño, comparta nuevas experiencias con una amiga o familiar, o reúnase con otras madres que estén amamantando.
• Si desea realizar ejercicio, consulte al personal de salud cuándo es el mejor momento para empezar.